Por Omar Ibarra, PA-C
La temporada de gripe ya está aquí.
El invierno está en el aire y con él llegan cosas buenas como el nuevo año y las fiestas decembrinas, pero también el aumento estacional de virus como los resfriados, la COVID-19 y la influenza, comúnmente conocida como gripe.
A nivel local, la temporada de gripe suele comenzar en octubre y continúa hasta principios de la primavera. La gripe es una enfermedad respiratoria contagiosa que puede causar un malestar leve o grave, con síntomas como fiebre, tos, dolor de garganta, secreción o congestión nasal, dolores musculares o corporales, dolores de cabeza, fatiga y náuseas o vómitos. Aunque los síntomas de la gripe pueden parecerse a los del resfriado común, la gripe es más grave y puede provocar complicaciones como neumonía y, a veces, la muerte, en particular para las personas de los grupos de alto riesgo. Cuando todos tomamos medidas para prevenir la propagación de la gripe, podemos ayudar a mantener segura a nuestra comunidad.
La importancia vacunarse contra la gripe
La forma más eficaz de prepararse para la temporada de gripe es vacunarse. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan que todas las personas mayores de seis meses reciban una vacuna anual contra la gripe. Las vacunas contra la gripe se formulan en función de las cepas de gripe que se espera que sean más frecuentes en la próxima temporada de gripe. Debido a que el virus de la gripe cambia con el tiempo, vacunarse cada año es la mejor manera de protegerse y proteger a los demás. Aunque la vacuna contra la gripe no siempre previene la infección, puede reducir la gravedad de la enfermedad y disminuir la probabilidad de que transmita la gripe a otras personas.
La vacuna contra la gripe es especialmente importante para las personas que tienen un mayor riesgo de enfermarse gravemente, incluidos los niños pequeños, los adultos mayores, las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades crónicas. La inmunización también es importante para las personas que trabajan en hospitales, clínicas y consultorios, y las que suelen estar expuestas a grandes grupos, como los profesores, los que trabajan en el comercio y las personas que trabajan en el sector alimentario y hotelero. Incluso si es joven y está sano, vacunarse contra la gripe es importante para la salud personal y de la comunidad. Reduce el riesgo de contraer la gripe, disminuye el riesgo de presentar síntomas graves y contribuye a la inmunidad colectiva, lo que reduce la propagación de la gripe en general, lo que protege a las personas que son vulnerables a complicaciones graves.
La mayoría de los planes de seguro médico cubren el costo de la vacuna contra la gripe. Para quienes no tienen seguro, los centros de salud comunitarios como MCHC Health Centers (MCHC) brindan vacunas contra la gripe sin costo. Recomiendo vacunarse lo más antes posible, pero es mejor vacunarse en cualquier momento durante la temporada de gripe que no vacunarse en absoluto.
Existe la idea errónea de que la vacuna contra la gripe puede provocar la gripe, pero las vacunas contra la gripe no pueden causarla; ninguna de las vacunas contra la gripe contiene virus vivos que puedan causar enfermedades. Algunas personas pueden experimentar efectos secundarios leves, como dolor en el brazo, dolor de cabeza o fiebre baja, pero estas son respuestas inmunitarias normales y, por lo general, no duran mucho.
Vacunarse contra el COVID-19
El otoño también es un momento importante para vacunarse contra el COVID-19. Los CDC recomiendan que todas las personas de seis meses o más reciban una dosis de la vacuna contra el COVID actualizada para 2024-2025. Puede escalonar sus vacunas contra el COVID y la gripe o recibirlas al mismo tiempo. La vacuna contra la COVID es crucial incluso después de una infección para reforzar la inmunidad y proteger contra la reinfección, ya que la inmunidad natural contra la COVID disminuye con el tiempo. Los CDC recomiendan esperar tres meses después de una infección por COVID para recibir la vacuna contra la COVID más reciente. Hable con su proveedor médico si tiene inquietudes sobre los posibles efectos secundarios, la eficacia de la vacuna o cuándo debe vacunarse.
Qué hacer si contrae gripe
Si cree que tiene gripe, manténgase hidratado y descanse mucho. La gripe es más contagiosa durante los primeros tres días. Quédese en casa y mantenga la distancia de los demás cuando sea posible. Si debe estar en contacto con personas, considere usar una mascarilla. En los casos leves, el descanso y los medicamentos de venta libre, como descongestionantes y analgésicos, pueden aliviar los síntomas. Lavarse las manos regularmente con agua y jabón, usar desinfectante para manos cuando no haya jabón disponible y cubrirse la boca al toser o estornudar ayudan a reducir la propagación.
Si tiene un alto riesgo y cree que tiene gripe, comuníquese con su proveedor médico para hacerse la prueba. Si el resultado de la prueba es positivo, su proveedor puede recetarle un medicamento antiviral como Tamiflu (oseltamivir). Estos medicamentos son más efectivos cuando se toman dentro de los primeros días de aparecer los síntomas, por lo que es importante consultar a su proveedor médico de inmediato. Independientemente de su nivel de riesgo, comuníquese con un proveedor médico si experimenta síntomas graves, como dificultad para respirar, dolor en el pecho o mareos persistentes.
A medida que continuamos afrontando los desafíos de la gripe, además de otros virus circulantes como el COVID-19, recibir la vacuna contra la gripe y trabajar para detener la propagación puede ayudar a nuestra comunidad a mantenerse saludable.