Por ROSHANDA GRAYSON-THOMAS
Alrededor del 65% de los estadounidenses mayores de edad consumen alcohol, pero ¿es seguro?
Esa es la pregunta que muchos se hacen a medida que aumenta la evidencia científica de que incluso pequeñas cantidades de alcohol, con el tiempo, aumentan el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer y otros problemas de salud graves. Aunque el consumo moderado se considera de bajo riesgo, este no es nulo; cuanto más alcohol consume una persona, mayor es el riesgo.
Los riesgos a corto plazo asociados con el consumo excesivo de alcohol se han difundido ampliamente durante décadas. El consumo excesivo de alcohol reduce la inhibición y la capacidad de tomar decisiones, lo que puede provocar lesiones, accidentes automovilísticos, sobredosis accidentales y un mayor riesgo de suicidio. Cada año, aproximadamente 178,000 personas en Estados Unidos mueren por consumo excesivo de alcohol, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Lo que ahora sabemos es que el consumo de alcohol también parece tener graves efectos a largo plazo. Se ha relacionado con cáncer colorrectal, de mama, oral, de esófago y de hígado, así como con enfermedades hepáticas, hipertensión arterial, aumento de peso, accidentes cerebrovasculares, enfermedades cardíacas, problemas digestivos, problemas de salud mental y falta de sueño. Puede interferir con la absorción de nutrientes y llevar a algunas personas a saltarse comidas por completo. El consumo excesivo de alcohol también aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cognitivas como la demencia.
La buena noticia es que cuanto más comprendamos sobre los impactos del alcohol, mejores decisiones podremos tomar para nuestra salud. Si decide beber menos o dejar de beber por completo, existen recursos y apoyo disponibles.
¿Qué significa beber con moderación?
Los efectos más perjudiciales del alcohol se asocian con el consumo excesivo, por lo que quienes deciden beber deberían hacerlo con moderación. Para las personas mayores de 21 años, que no estén embarazadas y que no tengan afecciones de salud subyacentes, los CDC actualmente recomiendan que los hombres limiten el consumo a no más de dos bebidas alcohólicas al día y las mujeres a no más de una. Cuando los CDC dicen “una bebida”, se refieren a una porción estándar: 355 ml de cerveza, 145 ml de vino o 43 ml de licor destilado (como whisky o vodka).
Para mayor seguridad, todos deberían evitar el consumo excesivo de alcohol, definidos como cinco o más bebidas en una ocasión para los hombres y cuatro o más para las mujeres. El consumo excesivo de alcohol conduce a conductas de alto riesgo y aumentan los riesgos para la salud a corto y largo plazo.
Consejos para reducir el consumo
Beber menos es mejor para nuestra salud, pero reducir el consumo, y mucho menos dejarlo por completo, puede ser un desafío. El alcohol está presente en todo nuestro ambiente social, desde reuniones familiares hasta las convivencias después del trabajo y celebraciones de todo tipo.
Si quiere beber menos alcohol, considere contárselo a sus amigos o familiares de confianza que lo apoyen. También podrías tener que limitar el tiempo con ciertas personas, aquellas que no apoyan tu objetivo. Cuando vayas a un evento donde sabes que te ofrecerán alcohol, lleva un plan. Elige con anticipación una bebida sin alcohol, como agua mineral y limón o una cerveza sin alcohol, y prepárate para responder si te preguntan por qué no bebes. Planifica actividades que no impliquen alcohol, como senderismo, pickleball o quedar con amigos para tomar un café.
Si disfrutas de una copa por la noche en casa, experimenta con opciones sin alcohol para tomar a sorbos y sírvelas en un vaso elegante para que te sientas como un capricho. Restablecer tus ritmos naturales también puede ayudar. Considera tomarte una semana o un mes sin beber (un octubre sobrio o un enero seco son buenos momentos para restablecerte) o limitar el consumo a los fines de semana. Con el tiempo, pequeños cambios como estos se acumulan.
Cómo reconocer las señales de alcoholismo
Si te encuentras incapaz de beber menos, preocupado por pensamientos sobre el alcohol, bebiendo a escondidas o experimentando efectos negativos en tus relaciones, ten en cuenta que hay apoyo disponible. Un buen primer paso es concertar una cita con tu médico para hablar de tus preocupaciones.
Sé que puede ser difícil y aterrador admitir que podrías tener un problema. Ya sea que esté lidiando con una dependencia del alcohol o cualquier otro problema de salud, los profesionales médicos están aquí para apoyarlo, no para juzgarlo. El alcoholismo y el consumo excesivo de alcohol afectan a personas de todas las edades, géneros, razas y orígenes. Es normal cometer errores al adoptar nuevos hábitos. Si hoy tomó una copa menos que ayer, o una menos esta semana que la anterior, es un paso que vale la pena celebrar.
Roshanda Grayson-Thomas es enfermera psiquiátrica de salud mental en los Centros de Salud MCHC, una organización comunitaria dirigida por pacientes que ofrece servicios integrales de atención primaria de salud, así como servicios de apoyo como educación y traducción para promover el acceso a la atención médica. MCHC incluye los Centros de Salud Hillside y Dora Street en Ukiah, los Centros de Salud Little Lake en Willits y los Centros de Salud Lakeview en Lakeport.
