Hola a todos en el condado de Mendocino,
Como su Oficial de Salud Pública y como médico familiar, les escribo para darles esta recomendación. Estoy muy preocupado por el aumento de casos de COVID-19 y las hospitalizaciones en nuestro condado. En el último mes, hemos visto que el promedio de nuevos casos de COVID se triplicó de 3.7 a 11 casos en promedio por día y la cantidad de personas hospitalizadas casi se ha triplicado de 5 a 14, cifras que no habíamos visto desde el terrible aumento del invierno pasado.
La variante/cepa Delta, que ahora se encuentra en nuestro condado, es dos veces más contagiosa y se propaga a más personas más rápido de lo que hemos visto antes. El virus está afectando más a las personas no vacunadas, pero incluso a las personas vacunadas que están inmunodeprimidas (edad avanzada, que tienen algunas enfermedades o están tomando medicamentos) están en riesgo. El COVID-19 está afectando a adultos más jóvenes y ahora es la décima causa principal de muerte en niños.
Por lo tanto, recomiendo ampliamente que todos en nuestra comunidad que UTILIZEN UN CUBREBOCAS CUANDO ESTEN EN UN LUGAR CERRADO/ADENTRO Y AFUERA con muchas personas no vacunadas.
Se ha demostrado que los cubrebocas disminuyen el peligro de que usted contagie a sus amigos, familiares y la comunidad. Los cubrebocas deben ser tener 2 o 3 capas de tela y deben ajustarse bien sobre la nariz y debajo del mentón para una protección óptima de quienes lo rodean. Las personas que necesitan más protección deben considerar usar una mascarilla tipo N95, la cual es más eficaz.
Los cubrebocas ayudarán a controlar esta pandemia. Pero las vacunas pueden ayudarnos a volver a la normalidad. Así que VACUNÉSE AHORA. Las vacunas son muy efectivas. Las personas no vacunadas tienen la probabilidad de infectarse de COVID 8 veces más que las vacunadas. Y aquellos que están vacunados y contraen COVID tienen una enfermedad más leve, rara vez necesitan el hospital y no es probable que mueran de Covid. La inmunidad obtenida de la vacuna es mayor y más confiable que contraer COVID. La ciencia detrás de las vacunas existe desde hace más de 20 años y se ha utilizado con éxito para la influenza, la rabia, el ébola y otros.
Las vacunas son seguras. No hay evidencia de que cambien nuestro ADN, nos etiqueten o nos pongan un chip o interfieran con la fertilidad. De hecho, los bebés y los bebés lactantes cuyas madres han sido vacunadas reciben inmunoglobulinas que pueden protegerlos. La Academia Estadounidense de Medicina Familiar, Academia Estadounidense de Pediatría, Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos, Sociedad de Medicina Materno-Fetal y todos los CDC recomiendan vacunar a las mujeres embarazadas y lactantes. “El COVID a largo plazo” ya ha demostrado ser mucho peor que cualquier efecto secundario a largo plazo de la vacuna.
En pocas palabras: el riesgo de contraer COVID es mucho mayor que la vacuna.
Finalmente, si se enferma con síntomas leves, MANTÉNGASE EN CASA y HAGASE LA PRUEBA, incluso si está vacunado, para que podamos detener la transmisión. Ninguno de nosotros quiere enfermarse, enfermar a otros o volver al “modo de bloqueo” nuevamente.
El año pasado, nuestra comunidad luchó con éxito durante esta pandemia trabajando juntos. Si seguimos estas recomendaciones científicamente probadas, podemos controlar este aumento y volver a la normalidad.
Dr. Andy Coren, Oficial de Salud Pública